El próximo 21 de noviembre se celebra en Argentina el Día de la Enfermería, profesión íntimamente ligada con la vocación de servicio y la empatía. El contexto sanitario actual por el avance de la pandemia, no solo reflejo esfuerzo y dedicación sino también aprendizaje.
La Asamblea Mundial de la Salud designó el 2020 como el año internacional de los profesionales de enfermería y de partería. Esta decisión pone en relieve mundial a la enfermería y a los recursos humanos de salud.
En el Hospital de Bariloche, María Rosa Delbares recorre los pasillos y las diferentes salas atendiendo a sus pacientes. Con 60 años cumplidos y próxima a jubilarse destaca que en su carrera de 34 años en la salud pública, nunca dejó de aprender y que en esta pandemia tuvo que ingeniárselas para cuidar al otro respetando la distancia.
Según cuenta “ya no están los cálidos abrazos al momento de dar el alta, pero buscamos la manera de seguir siendo afectuosos, por que debe siempre prevalecer el amor”.
María Rosa comenzó en el año 1986 en el área de maternidad y luego estuvo 20 años en quirófano donde fue jefa de su área. Tiene dos hijos, una nieta y esperanzas de seguir sirviendo desde otro lugar una vez que se jubile.
Sobre su profesión, explicó que “pude desarrollar mi empatía hacia el otro que está necesitado, a quien yo debo brindarle mi servicio. Me voy muy bien, creo que este tiempo que estuve pude dejar algo y que el paciente que me toco atender se fue con algo mío y eso es lo más fructífero de nuestro trabajo”.
“El Hospital es mi segunda casa, aprendí a querer y respetar este lugar, a adecuarme a las normativas dentro del servicio y creo que uno aprende a madurar y a crecer”, agregó con mucha emoción.
Asimismo, afirmó que “nuestra profesión es muy importante, no solo en la atención que brindamos sino también en la parte administrativa de la Institución. Prestamos nuestro servicio con calidad”.
En relación al desempeño durante la pandemia, expresó que “fue una enseñanza y produjo en mi algo triste porque quizás tuvimos que cuidar con distancia, pero siempre con atención y amor. Cuando me voy a casa me voy contenta, la vida continúa y puedo seguir sirviendo aun cuando ya no esté aquí. Es una profesión muy linda si sentís el servicio con amor”.
El Ministerio de Salud de la Nación instituyó por decreto, el 21 de noviembre como el Día de la Enfermería, en coincidencia con la festividad de Nuestra Señora de los Remedios, considerada patrona de la actividad.
A nivel internacional todos los 12 de mayo se celebra el Día Internacional de la Enfermería o Día Internacional del Enfermero, constituida como una jornada conmemorativa de las contribuciones de los enfermeros a la sociedad, promovida por el Consejo Internacional de Enfermería.
El personal de enfermería y partería desempeña una función crucial en la prestación de servicios de salud, ya que consagran sus vidas a cuidar a las madres y a los niños, administrar vacunas que salvan vidas, proporcionar consejos, cuidar de las personas mayores y, en general, satisfacer las necesidades sanitarias esenciales del día a día.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) la Región de las Américas cuenta con alrededor de 9 millones de profesionales de enfermería, de los cuales la mitad son enfermeros licenciados.
La fuerza de trabajo de enfermería y partería representa casi el 50% de la fuerza de trabajo de salud, y son fundamentales para proporcionar la atención primaria de salud.