Busca establecer un equilibrio representativo en este órgano que sólo sesiona en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y que elige a todos los jueces federales del país. Propone que funcione en forma presencial o remota en las provincias, y que la designación de los magistrados la realicen académicos, jueces y abogados de cada distrito judicial que formen parte del Consejo de la Magistratura.
El senador nacional por Juntos Somos Rio Negro, Alberto Weretilneck, presentó este lunes una iniciativa en la cámara alta del Congreso para darle un carácter realmente federal al Consejo de la Magistratura, equilibrando su composición y agilizando su funcionamiento.
La propuesta tiene dos ejes centrales: descentralizar, estableciendo un equilibrio de representación que respete el federalismo establecido en la Constitución Nacional, e instrumentar un proceso ágil y transparente tanto para la selección de funcionarios, como para su sanción. Además, busca una mayor oralidad en los procesos y más transparencia, a partir de la transmisión de las sesiones.
Weretilneck explicó que “desde 1994 en adelante, en las sucesivas reformas que plantearon diferentes composiciones y formas de elección de los consejeros -en función de diferentes interpretaciones de la Constitución-, el carácter federal de las instituciones fue un gran ausente”.
“Proponemos entonces una serie de modificaciones para que al momento de elegir un magistrado del interior participen en el proceso jueces, abogados y académicos de la jurisdicción donde se produce la vacante -de igual forma para sanciones y remociones-, además de llevar a cabo los procesos en la jurisdicción provincial correspondiente en forma presencial, remota o mixta”, sostuvo.
El otro eje de la propuesta del senador rionegrino está centrado en agilizar el Consejo y los procesos mediante la reorganización de su estructura y la fijación de plazos. Para ello, propone crear secretarias permanentes encargadas de llevar adelante los procesos mientras el pleno del consejo reserva la facultad de decidir finalmente.
“Respecto a su integración planteamos además otra modificación: el Consejo se integrará por 15 miembros, sumando a la integración actual al Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La novedad consiste en que no va a poder ser designada una misma persona durante años consecutivos, ya que se debe garantizar la alternancia, tanto en el cargo de presidente como en los restantes”, destacó.
Según explicó Weretilneck, lo integrarán también tres consejeros del “Colegio de Abogados” del distrito judicial que corresponda, confirmados a través de elecciones que se lleven a cabo en los distintos distritos en concreto. También lo compondrán el “Ministro de Justicia y Derechos Humanos” que representa al Poder Ejecutivo, y por un académico del distrito Judicial correspondiente.
“La demora en seleccionar magistrados una de las mayores críticas que se le efectuó a esta institución desde sus comienzos. Por eso, aspiramos a lograr transparencia y celeridad en la selección de magistrados y en los procesos de sanción y eventual enjuiciamiento”.
Indicó el exgobernador rionegrino que “pretendemos crear un Consejo Dinámico. Buscamos eliminar la gran burocracia que mantiene el Consejo de la Magistratura por medio de las distintas comisiones, y dotarlo de una mayor operatividad, creando dos secretarias permanentes: una destinada a los concursos, y otra secretaría a los sumarios disciplinarios. En relación a la selección de magistrados se establece como plazo máximo de duración del proceso en 180 días”.
En lo relativo a su funcionamiento, estará compuesto por las dos secretarias permanentes antes mencionadas, y toda la sede administrativa se encontrará en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, facultándose igualmente a que en forma paulatina se proceda a descentralizar la sede administrativa en distintos lugares del territorio.
Otro de los puntos clave es la búsqueda de una mayor oralidad en los procesos de selección y sanción, como asimismo dotar de mayor transparencia, a partir de la transmisión de las sesiones y de la registración de las mismas.
“Se mantendrá la forma de elección de consejeros y jurados interpretada como constitucional en el origen de la ley, pero proponemos una mayor representación civil, al incorporar un nuevo integrante al estamento de los abogados de la matricula federal para equilibrar la representación de los poderes estatales y civiles, siendo que la representación civil es la más relegada al momento”.