Legisladores de Juntos Somos Río Negro pidieron al Gobierno Nacional la restitución del precio referencial patagónico en los combustibles. La medida favorecería la reactivación de la actividad turística regional, cuando las condiciones sanitarias así lo permitan.
Adriana del Agua -acompañada por Juan Pablo Muena, Julia Fernández, Claudia Contreras y Graciela Vivando-, impulsa un proyecto de comunicación dirigido al Ministerio de Turismo y Deportes, para reponer los beneficios que otorgaron las leyes nacionales Nº 23.996 y 27.209.
La restitución “haría justicia con las enormes distancias patagónicas y con la construcción de los costos de los prestadores de servicios turísticos asociados al transporte de pasajeros, que se ven frente a una desventaja comparativa muy importante en relación a otras regiones del país, que tienen a los núcleos emisores de turistas a distancias mucho más cortas”, expresan los legisladores en la argumentación de la iniciativa.
La pandemia mundial de coronavirus, que está asestando un duro golpe al sector turístico, podría suponer al mismo tiempo una oportunidad para cambiar el sistema de los viajes, y volver a un turismo similar al de los años 70: familiar, en coche y de proximidad, según explican expertos del sector.
Se prevé que, cuando se reinicie la actividad, la mayor parte de los viajes serán en vehículos particulares. Por eso, contar con combustibles más baratos serviría directamente para incrementar el movimiento de turistas al mejorar la oferta de la región.
En este sentido y atento a la dinámica que va tomando la actividad, las provincias patagónicas han solicitado, en bloque, implementar una rebaja en los combustibles, para impulsar el turismo regional cuando las condiciones sanitarias lo permitan.
El pedido fue realizado en Asamblea N°153, encabezada por el ministro de Turismo y Deporte de la Nación, Matías Lammens, en la que se abordó especialmente la situación del sector turístico pos COVID-19.
Pospandemia
Encuestas impulsadas desde el sector, dan cuenta de que la mitad de los emprendimientos del rubro reducirán su facturación dramáticamente en el 2020, y que se perderían ingresos de entre el 50 al 75% en la actividad turística por efectos de la pandemia.
En el trabajo titulado “El día después” de “Invertur”, cinco de cada diez consultados dijeron que prevén una pérdida de ingresos de entre el 50% y el 75% para este año, mientras que un 20% calcula que su facturación bajará entre un cuarto y la mitad del total.
Pensando en la era post-coronavirus, “Invertur” le preguntó a su comunidad cuáles son los mercados que responderán primero en la fase de recuperación. Lógicamente, el 93% sostuvo que serán el local y nacional. Apenas el 6% apostó por el regional, mientras que un 1% aseguró que será el internacional.
Por último, el 89% de los participantes dijeron que los incentivos fiscales, crediticios y laborales serán clave para potenciar a las compañías de turismo. En tanto, el 10% aseveró que se debe poner el foco en los planes de promoción, marketing y comunicación.
A pesar de la probada resiliencia de la actividad durante la H1N1, la activación de volcanes, atentados internacionales, crisis financieras y demás amenazas ya soportadas, el impacto y alcance de esta pandemia no tiene comparación, e invita a trabajar en equipo para asimilar el golpe y prepararse para la recuperación.
La Cámara Argentina de Esquí y Montaña (CAEM), refirió por ejemplo que, aún contra los peores pronósticos, se han estado preparando, de manera muy proactiva para esta temporada de invierno, con el objetivo de cumplir a rajatabla con los lineamientos de un protocolo sanitario propuesto por el Ministerio de Turismo y Deportes en el entendimiento de que hay mucha gente involucrada en la situación, y que el mayor desafío pasa por mantener todos los puestos de trabajo, que es aquello para lo que se está trabajando.
Muy a pesar de ello, el empresariado ya ha puesto en duda la llegada de turistas extranjeros, debido al cierre de las fronteras y a la complicada situación que atraviesa Brasil, uno de los principales emisores de viajeros en este segmento; y sostienen que de efectivizarse una apertura, sería absolutamente de carácter nacional.
Los funcionarios también subrayan que la recuperación del nivel de actividad “se dará de la mano del turismo interno” haciendo especial hincapié en cuatro pilares fundamentales: seguridad, cercanía, naturaleza y calidad; y en consecuencia ya se están trazando estrategias para potenciar ese segmento, que es una gran herramienta para los prestadores del interior del país.
La pandemia golpeó mucho a la industria del turismo, pero este nicho tiene un gran potencial de reinversión. Las investigaciones dicen también que una de las primeras cosas que la gente quiere hacer, es volver a viajar y los productos masivos se van a postergar en tanto no aparecerán como buenas alternativas.
El viajero buscará fundamentalmente destinos cercanos, con pocos turistas y la Patagonia tiene mucho para ganar en este contexto, con un potencial de naturaleza muy grande, con la posibilidad de disfrutar de experiencias altamente satisfactorias y sin aglomeraciones, aunque las distancias puedan jugarle en contra a sus expectativas.
En consecuencia, el pedido de los legisladores al Gobierno Nacional.