La mayoría oficialista del Concejo Municipal de Bariloche, solicitó a la Legislatura que se le pida la renuncia al legislador Ricardo Arroyo por negarse semanas atrás a un control de alcoholemia en esa ciudad.
El documento remitido a la Legislatura por parte del Concejo barilochense, está firmado por bloques de Concejales de Juntos Somos Río Negro, el PRO y por el Presidente del cuerpo, Diego Benitez. El texto recuerda que, por mayoría, se decidió solicitar la dimisión del legislador “tras el escándalo por haberse negado a realizarse el control de alcoholemia”, según publicó el sitio En Estos Días.
Además, los ediles aseguran que en la sesión donde se decidió reclamar la renuncia la banca -con fecha del 15 de agosto- Arroyo se presentó de forma espontánea “para justificar su accionar” y puso en tela de juicio las ordenanzas de control de alcoholemia. Fue “un claro acto de avasallamiento de la autonomía municipal”, plantearon los concejales.
Asuntos Constitucionales
La solicitud del cuerpo deliberativo de Bariloche, ahora es un asunto oficial que deberá resolverse en la Comisión de Asuntos Constitucionales y Legislación General de la Legislatura, que preside la ultraoficialista Tania Lastra.
Por ese motivo, la decisión desnudará la intención de Juntos Somos Río Negro en relación a la suerte de Arroyo.
El legislador -ahora al frente del monobloque CFK Argentina– se negó a un test de alcoholemia que inspectores municipales de Bariloche quisieron realizarle el pasado 12 de agosto, cuando conducía su vehículo personal en la ciudad andina. En esa oportunidad, le secuestraron su carnet de conducir y él admitió que había bebido.
A pesar de que en la Provincia de Río Negro existe la Ley de Alcohol Cero al Volante, el legislador siempre denunció este hecho como “una venganza” por parte de aliados del Gobernador Alberto Weretilneck -por el Intendente Gustavo Gennuso-, por haber abandonado el espacio oficialista y denunciar corrupción en Juntos Somos Río Negro. (diariolegislativo.com)
