Los intendentes del justicialismo nos oponemos al presupuesto 2019 que pretende imponer el presidente Macri y que cuenta con el aval del gobernador Weretilenck. Este Presupuesto no es más que un brutal ajuste exigido por el FMI, que importa la quita de derechos vitales para los patagónicos. Los intendentes sabemos que ese ajuste impactará sobre los trabajadores y los jubilados, incrementando aún más la recesión y el desempleo. Un ajuste que aniquila subsidios y hace desaparecer la obra pública. Una política de Estado que conduce necesariamente al hambre y la inestabilidad social.
Lamentamos profundamente la obsecuencia del gobernador Weretilenck con el gobierno del Presidente Macri. La firma del Pacto Fiscal y el aval al Presupuesto 2019 significan para los patagónicos la entrega de recursos, la claudicación de derechos y la pérdida de dignidad de nuestros vecinos. Debemos afirmarlo, porque no son momentos para hacerse los confundidos, ni ser funcionales al saqueo.
Con el Presupuesto de Macri, el presupuesto del ajuste, se reduce el plus por zona desfavorable para nuevas jubilaciones y recorta las asignaciones familiares para trabajadores patagónicos. Serán más los trabajadores que pagarán impuesto a las ganancias. Se reduce al mínimo la obra pública en la provincia. Se destruye el incentivo docente y el presupuesto para nuestras universidades.
Por eso exigimos y respaldamos a nuestros legisladores en el Congreso Nacional, para que sigan alzando la voz en defensa del pueblo que representan y se opongan al descalabro que produciría hoy profundizar la crisis que generan estas políticas neoliberales.
