El mega endeudamiento por 300 millones de dólares para proyectos de infraestructura concertado por el gobierno de Alberto Weretilneck en 2017, significa hoy una carga insostenible para las finanzas provinciales y municipales. Un proyecto del Frente de Todos propone postergar los vencimientos para los municipios endeudados hasta el año próximo.
La mecánica del Plan Castello preveía que de aquellos 300 millones de dólares, el 5% fuera destinado como aporte no reintegrable a los 39 municipios de la provincia en partes iguales. Vale decir, U$S 379.628,00 para cada ciudad. Y el otro 5% (15 millones de dólares) quedara disponible para los municipios que quisieran tomarlos como créditos en la misma divisa e iguales condiciones en que fueron negociados por el gobierno provincial, a una tasa anual del 7,75% y bajo legislación estadounidense, a un plazo promedio de 7 años.
La mayoría de los intendentes fueron cautos a la hora de asumir un compromiso en dólares, cuando ya se vislumbraban las crisis cambiarias provocadas por el gobierno anterior.
“Los intendentes se encuentran ahora con una tormenta perfecta”, señaló María Eugenia Martini, presidenta del bloque del FdT: “crisis sanitaria, menor recaudación, caída de la coparticipación, mayor demanda asistencial, y una deuda que se disparó en dólares y que hay que pagar. Lo que el bloque propone es un período de gracia de seis meses para el pago de los vencimientos de este año, también con la expectativa de superar el punto más crítico de la pandemia”.
“Fundamentalmente se trata de dar aire a las finanzas municipales. Que los intendentes puedan disponer de recursos para todo lo que hoy es urgente”, sostuvo Martini.
Cuando la provincia aprobó la emisión de deuda, el dólar cotizaba a 17 pesos, y rondaba los 22 pesos cuando algunos intendentes resolvieron asumir el tramo disponible de financiamiento en moneda dura. Hoy la cotización se acerca a los 70 pesos por dólar.
A las 10 municipalidades que aceptaron los créditos en dólares que el plan preveía, ya se les descontaron de la coparticipación durante 2019 unos 30 millones de pesos. Con la misma mecánica la provincia continuará capturando los fondos este año -y sucesivos- para afrontar a su vez los vencimientos por intereses de la deuda.
Esta situación se torna insostenible en el actual contexto de retracción económica provocado por aislamiento social impuesto por la pandemia de Covid-19. Al igual que el gobierno provincial, los municipios endeudados debieron poner freno a la obra pública y apelar en buena medida a los fondos del Castello para cubrir gastos corrientes.
En algunos casos la situación de asfixia es más que sensible.
Sobre estos argumentos el Frente de Todos impulsó el proyecto de Comunicación al Ejecutivo provincial para que se posterguen por 180 días los desembolsos municipales en concepto de intereses del Plan Castello.
“Las necesarias medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio dispuestas por los distintos Estados han generado una inactividad económica que profundiza aún más esta crisis” señala la iniciativa, y recuerda: “(una crisis signada por el descomunal endeudamiento internacional, del cual nuestra provincia en línea ideológica directa con la administración de Cambiemos, ha sumergido a las arcas del Estado)”.
